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Petición para suscribir un llamamiento unitario contra la adopción sin referéndum del nuevo Tratado de la UE
En 2005, las ciudadanas y ciudadanos de Francia y Holanda rechazaron la "constitución" europea que los Jefes de Estado de Gobierno habían adoptado. En varios países, este tratado no se ha ratificado nunca. A finales de junio de 2007, los Jefes de Estado y de Gobierno lanzaron por la vía rápida un nuevo Tratado europeo, sin debate popular, sin referéndum.
Contrariamente a lo que dicen algunos gobernantes no se trata de un "minitratado”. Bajo otro nombre y otra forma, este tratado conserva la parte fundamental de la "constitución" rechazada.
Así, en contra de lo que se ha afirmado, "el respeto a la economía abierta de mercado donde la competencia es libre" seguirá siendo la piedra angular de la construcción europea, a la cual se supedita todo. No se tienen en cuenta ninguna de las principales exigencias planteadas en el debate sobre el Tratado constitucional: los servicios públicos, la igualdad hombre-mujer, la laicidad, la conservación del medio ambiente y los recursos no renovables, la Europa social, el rechazo de la libre circulación de capitales y del dumping fiscal, el exceso de poder y de atribuciones del Banco Central Europeo (BCE), la defensa de una política de paz, el funcionamiento democrático de la Unión Europea. Nada de nada.
Los servicios públicos permanecen sujetos a las normas de la competencia. Se mantiene la referencia a las "herencias religiosas". No se ha levantado ninguno de los de los obstáculos que impiden la mejora de la legislación social. Las políticas medioambientales se diluyen como consecuencia de las opciones económicas ultraliberales. Se preserva el poder del BCE. Se consolida la inclusión de la defensa europea dentro de la política de la OTAN, es decir, su sumisión a los Estados Unidos y la militarización de Europa. La Carta de "Derechos Fundamentales", que era ya muy insuficiente, se vacía de todo contenido práctico. Y, tal como estaba previsto en el Tratado constitucional, no hay cambios reales en el sistema institucional actual, que sigue siendo profundamente antidemocrático. En resumen , nos encontramos con todo lo necesario para convertir a Europa en una zona sometida a la aplicación del libre comercio y a la promoción de las políticas neoliberales, en lugar de una Europa que pueda ser construida democráticamente, proponiendo otra vía diferente que no suponga el coto de actuación de las multinacionales y de los mercados financieros.
Somos firmes partidarios de una Europa emancipada de esta tutela de las potencias financieras, dispuestos a rechazar las políticas agresivas de dominación y las intervenciones militares, y capaces de poner en marcha nuevas relaciones internacionales, en particular, con los países del Sur. Queremos una Europa basada en el rechazo de todas las discriminaciones, el respeto efectivo de la diversidad cultural y la convergencia hacia arriba de los derechos sociales, de las normas medioambientales y de la protección de los consumidores. Queremos una Europa construida sobre la voluntad y la soberanía popular. Por esta razón rechazamos este nuevo Tratado. Y hacemos una propuesta: la elaboración de un nuevo texto constituyente tras un proceso democrático, popular y transparente; y a continuación su ratificación por referéndum en todos los Estados.
Hacemos un llamamiento a tod@s aquell@s que quieren esta Europa a movilizarse allí donde estén, a hacer converger sus iniciativas y a unir sus fuerzas para explicar el verdadero contenido del nuevo Tratado, denunciar el engaño y abrir una nueva perspectiva de una Europa democrática, social, ecológica y solidaria. Para evitar que el pueblo intervenga y participe, el gobierno Zapatero quiere hacer adoptar el nuevo Tratado por la vía parlamentaria. Nada dice que pueda hacerlo. Los ciudadanos y los cargos electos, cualquiera que haya sido su voto, deben oponerse a que la democracia y la voluntad popular sean menospreciadas y deben exigir un nuevo referéndum.
Noviembre 2007
Algunas organizaciones que han suscrito esta petición en Europa: Attac France / ¡cCa! / Alter / AlterEkolo / Alternativos / Alternativa Ciudadana Genevilliers 92 / APEIS - Cactus la Izquierda / Colectivo de los Socialistas para el Renacimiento de la Izquierda (CSPRG) / Confederación Campesina / Convergencia Ciudadana para una Alternativa a la izquierda (CCAG) / Convergencia para la defensa y el desarrollo de los servicios públicos / Coordinación de los Grupos de Mujeres Igualdad / Coordinación nacional de los colectivos antiliberales / Democracia y Socialismo / Federación de las Asociaciones de los Trabajadores y Jóvenes (DIDF) / Fundación Copérnico / Fuerzas Militantes / LCR - Marchas europeas / MARZO -Izquierda Republicana / PCF / PCOF - para la República Social (PRS) / Red Feminista Rupturas / Unión de familias laicas.
De la CEE a la UE “superpotencia mundial” (Roma, 1957-Lisboa, 2007)[1]
Publicado por Ricardinho en 22:3850 años de la “Europa” del capital culminan con el nuevo Tratado de Reforma [1]
Ramón Fernández Durán
Ecologistas en Acción
“Con las nuevas amenazas la primera línea de defensa estará a menudo en el extranjero (...) Varios países y regiones corren el riesgo de resultar atrapados en una espiral de conflicto, inseguridad y pobreza (...) Hay que estar preparados para actuar antes de que se produzca una crisis (…) Una serie de países se han situado al margen de la sociedad internacional (...) Algunos han buscado el aislamiento. Otros vulneran persistentemente las normas internacionales. Es conveniente que estos países puedan unirse a la comunidad internacional. Aquellos que no desean hacerlo deberán comprender que han de pagar un precio, incluso en sus relaciones con Europa”
“Una Europa segura en un mundo mejor”, Estrategia de Seguridad Común para Europa (Documento Solana), Salónica, junio, 2003
“No hay ningún interés ahora en tener el apoyo de los ciudadanos europeos, como era la intención con la falsa (y rechazada) Constitución Europea, porque con el nuevo Tratado de
“Europa, la gran derrotada”, Ignacio Sotelo, EL PAÍS, julio, 2007
Los orígenes del “proyecto europeo”
Tras
En esta situación de debilidad y dependencia, en un momento además en que las antiguas potencias coloniales europeo-occidentales perdían poco a poco sus antiguos imperios en África y Asia, quedaban en un papel secundario en las instituciones de Bretton Woods (FMI y BM) bajo el dominio del dólar, y cuando los mercados nacionales eran asimismo muy limitados para enfrentar una competencia creciente por parte de EEUU, las elites económicas y financieras europeo-occidentales presionan a sus Estados para enfrentar este nuevo escenario de enorme incertidumbre para ellas. Unos Estados que se habían convertido (presionados por la situación social y geopolítica) en garantes de un nuevo pacto entre el capital y el trabajo, para gestionar el nuevo capitalismo keynesiano posbélico. Europa occidental había dejado de ser el centro del mundo. Y lo había sido durante casi quinientos años. La retirada de Francia y Gran Bretaña en su incursión militar en el Canal de Suez, en 1956, contra su nacionalización por Nasser (con el apoyo de
Por otro lado, desde los sesenta, las tensiones con EEUU van aumentando paulatinamente. La creciente rivalidad económica, los desencuentros noratlánticos con
Mercado Único, y una nueva “Europa” (neoliberal) que se construye en torno al euro
Desde finales de los setenta, y especialmente con la presidencia Reagan, EEUU (seguido de
Mientras tanto,
Pero Maastricht era bastante más que
En este nuevo escenario, una vez evaporada la bipolaridad de
Mientras tanto, el nuevo “proyecto europeo” se sigue ampliando. En 1995, ingresan por referéndum Suecia, Finlandia y Austria (y Noruega sigue diciendo “No”). Es decir, la antigua Europa occidental (prácticamente) es parte ya de
El mundo post-11-S, una nueva amenaza para
En paralelo, desde finales de los noventa, EEUU propone la ampliación al Este de
Así, las tensiones internas y especialmente los frenos que establecen especialmente Gran Bretaña, acompañada de
De esta forma, el “proyecto europeo” está aquejado de una fuerte y creciente falta de legitimidad. En sus primeros años, hasta los ochenta, durante esos treinta años de capitalismo de “rostro humano”, mientras se construía el “Estado del Bienestar”, y se daba una situación de pleno empleo (fordista), aunque excluía a las mujeres relegándolas en general al ámbito del trabajo doméstico, y se profundizaba el impacto ambiental, la (débil) “construcción europea” de entonces gozó de una relativa buena imagen pública. En esta etapa, la fuerte contestación social (y antipatriarcal) existente se desarrollaba en el marco del Estado-nación. Sin embargo, desde mediados de los ochenta, cuando se inicia el giro neoliberal del “proyecto europeo”, y se van imponiendo desde Bruselas sus recetas al conjunto de los países miembros, con el paulatino desmontaje del “Estado social”, al tiempo que se acaparan por
No existe un imaginario común “europeo”, y las estructuras comunitarias (apoyadas en los Estados) lo están intentando crear en base al miedo al “otro”, interior y exterior, presentándose ante la ciudadanía como la mejor garantía de seguridad, interna y externa, con el fin ganar legitimidad (el euro también es un importante cemento de imagen común en un mundo donde el dinero es básico). Con la fracasada Constitución, y ahora con el nuevo Tratado de Reforma,
El No francés y holandés a
El “proyecto europeo” que definía
De esta forma, Washington ha estado intentando dividir a Europa en los últimos tiempos con el nuevo escudo de misiles que piensa desplegar en Polonia y República Checa, argumentando que su objetivo es protegerse de un posible ataque de Irán. Esta situación esta creando tensiones crecientes tanto dentro como fuera de
Pero volvamos a
El Tratado de Reforma: una Europa de Estados antidemocrática y sin alma, que aspira a convertirse en superpotencia mundial
La elaboración del nuevo Tratado de Reforma ha sido aún más antidemocrática que la de
Pero aparte del cambio de nombre, y de la desaparición de los ciudadanos, el “proyecto constitucional” ha sufrido otras ligeras, y no tan ligeras, modificaciones para poder ser aceptado por todos, y especialmente por Gran Bretaña y Polonia [13]. Ambos fuera del euro, y ambos con fuertes lazos con EEUU. Los dos han logrado que
Por otro lado, en el nuevo Tratado se suprimen todos los símbolos europeos: la bandera, el himno y el término “Ley europea”, para no generar el rechazo de los más “euroescépticos”. Esto es, cualquier referencia que pueda sugerir que un gran Estado paneuropeo está en gestación. Lo cual es muy importante porque los símbolos mueven montañas, y ayudan a crear un imaginario europeo del que
Esto es, la principal sustancia de la fracasada Constitución permanece, aunque algo más condicionada aún por Gran Bretaña y el marco transatlántico. Esto es, capacidad de veto en política exterior y de seguridad (aunque limitada en el tiempo). El Reino Unido mantiene su capacidad para perseguir su propia política externa y de seguridad, es decir desarrollar su papel independiente en el mundo, mano a mano con EEUU. Por otro lado, los vínculos con
Estas reformas permitirán a Europa reforzar su proyección mundial, y en especial a sus grandes Estados [16]. Hasta ahora
Así,
Pero la razón de todo ello es también mantener en funcionamiento este modelo económico basado en el crecimiento sin límites, alimentado por el consumo de energía y por la expansión descomunal del crédito a todos los niveles, que está creando tremendas burbujas financieras (inmobiliaria y de complejos instrumentos financieros: derivados, private equity, hedge funds), que están empezando a explotar como resultado del fuerte cambio experimentado en las variables que las han posibilitado (tipos de interés, precio del petróleo, etc.). Dichas burbujas, especialmente la inmobiliaria, están generando un verdadero terremoto social, provocando un enorme trasvase de rentas de los sectores no propietarios hacia los sectores propietarios, aparte de un brutal impacto territorial y ambiental. En la reciente crisis mundial de los mercados financieros a causa de la crisis inmobiliaria en EEUU, que está todavía en marcha,
El nuevo Tratado (y la nueva directiva del mercado único de capitales) da aún más poder al mundo del dinero, reforzando el papel del BCE y sometiendo todavía más a la economía y al conjunto de la sociedad a su lógica implacable. Pero esta carrera hacia el abismo a la que nos conduce el actual modelo será imposible de parar, si no se inicia pronto un cambio radical del actual modelo económico, monetario y financiero, pues antes o después, y todo parece indicar que será muy pronto, el pico del petróleo pondrá fin al crecimiento sin límite, iniciándose además una nueva etapa presidida por el decrecimiento continuo de la economía. Lo cual implicará asimismo la quiebra de la expansión financiera sin fin. El principio del fin de la era de los combustibles fósiles pondrá coto, se quiera o no se quiera, a esta locura (hasta ahora) sin fin. Y más vale que este proceso lo hagamos entre todos de una manera ordenada y consensuada, y no presididos por la lógica de la competencia por los recursos, las lógicas de guerra y el “choque de civilizaciones” (al que Europa también se apunta con la boca pequeña; la connivencia de muchos gobiernos de
Una Europa a distintas velocidades y autoritaria, cada día más desigual y contestada
El nuevo Tratado configura no solo una Europa sin alma, sino una estructura institucional europea con distintos núcleos y periferias, que contendrá al menos dos (o tres) grandes Europas dentro de ella. Una, el Eurogrupo, los países que han adoptado o adoptarán el euro como moneda común (trece ahora, y quince dentro de poco). Ellos serán con toda probabilidad los que intentarán ir más allá en sus políticas de integración (“cooperaciones reforzadas”), y el nuevo Tratado lo permite en las áreas en que se pueden tomar decisiones por mayoría, aunque serán los actores más poderosos los que condicionarán su evolución. Fuera de ella habrá un grupo de países ricos al margen del euro, Gran Bretaña, Dinamarca y Suecia. El primero con una moneda todavía fuerte, la libra esterlina, y los otros dos con monedas de muy poca trascendencia internacional, que probablemente no tardarán en integrarse en el euro, aunque tal opción haya sido rechazada en el pasado por sus poblaciones en consultas populares. El resto de los países no miembros del euro son fundamentalmente los del Este, que lo más probable es que tarden en integrarse en la moneda única, pues manifiestan severos desequilibrios económicos como consecuencia de su incorporación (dependiente) a
Pero la futura Europa tendrá también otras periferias (cercanas, aparte de las lejanas) o círculos concéntricos, con el fin de ampliar sus mercados, y las reglas del Mercado Único, así como garantizar su seguridad interna y externa. Lo mismo que EEUU hace con México y Canadá [18]. De hecho, las lleva construyendo desde hace tiempo. Una, será la que se está creando en su flanco el Sur, y que Sarkozy pretende rebautizar como Unión Mediterránea. Su objetivo es controlar la inmigración, acceder a sus recursos naturales y sobre todo energéticos, deslocalizar empresas, y establecer una política común de seguridad (migratoria y antiterrorista). No en vano es un área muy conflictiva, y además es la frontera “Norte-Sur” más desigual del mundo, que se quiere controlar, al mismo tiempo paradójicamente que la lógica de mercado desarticula sus economías, sus sociedades y sus Estados. Esta Unión Mediterránea estaría “presidida” por Francia, pero también tendrán un papel importante en la misma España e Italia, y Sarkozy pretende compensar a Turquía con el ingreso en la misma, ya que se opone (hasta ahora) a que se convierta en miembro de pleno derecho de
Todo ello se intenta encubrir con una Carta de Derechos Fundamentales, de consecuencias jurídicas dudosas, que para nada recoge de forma vinculante los derechos sociales (cada día más erosionados), y que además ha quedado fuera del nuevo Tratado (en el que tan sólo se menciona su existencia) por exigencia de Gran Bretaña y Polonia. La primera, porque no quería que se pudiera reconocer a partir de ella el derecho de huelga, y la segunda porque ha introducido una Cláusula Moral, que permite al país suprimir derechos fundamentales para las mujeres (aborto, divorcio) y determinados colectivos sociales (gays, lesbianas y transexuales).
Pero las sociedades civiles europeas, organizaciones sindicales (principalmente fuera de
Pero también se está desarrollando una creciente oposición a esta nueva Europa neoimperial en América Latina y en África, muy especialmente, y en menor medida en Asia, sobre todo en respuesta a las políticas de acuerdos de “libre comercio” que
Madrid, noviembre, 2007
PD: Un comentario final merece la situación que se puede crear aquí, en el Estado español, con la ratificación del nuevo Tratado. Un Estado con crecientes tensiones territoriales, pero en el que las distintas elites nacionalistas apoyan y promueven el “proyecto europeo”. El gobierno español fue el primero en aprobar en referéndum
[1] Este texto amplía y actualiza uno de los capítulos del libro del autor “La compleja construcción de
[2] Los Estados que firman primero el Tratado de Bruselas son Bélgica, Francia, Luxemburgo, Holanda y Reino Unido, y en 1954 se unirían Alemania Occidental e Italia, cuando se crea formalmente
[3] Un paso previo fue la creación de
[4] El dólar deja de estar vinculado al oro. Es decir, EEUU se niega a cambiar los dólares que hay circulando por el mundo por el metal precioso, tal y como se había comprometido en BW.
[5] Al tiempo que empieza la construcción de la “Europa fortaleza”, a través del Acuerdo Schengen. Ya no eran necesario unos flujos inmigratorios tan intensos como se habían dado en los sesenta y setenta, y además estos se acrecentaban aceleradamente debido a la desestructuración periférica provocada por los procesos de “globalización”. Schengen iba a instaurar la libre movilidad de personas en dicho espacio.
[6] Espacio que abarca desde el Sureste británico (con el Gran Londres, como centro principal), al Norte de Italia (con Turín y Milán, como cabeceras), pasando por el Norte de Francia (estructurado en torno a París), el Benelux, y gran parte de la antigua Alemania Occidental. Una megalópolis global en consolidación.
[7] Polonia, República Checa, Eslovaquia, Hungría, Eslovenia, Letonia, Estonia, Lituania, Chipre y Malta, en 2004, y Rumania y Bulgaria, en 2007.
[8] Esto es, el poder de Bruselas se va imponiendo poco a poco sobre los poderes estatales, y todos ellos a su vez sobre una ciudadanía desarticulada.
[9] Está previsto el futuro ingreso de Croacia, y las complicadas negociaciones para la adhesión de Turquía ya se han iniciado también, pero un conjunto de Estados europeos hacen cola para ingresar. El resto de los países de la ex-Yugoslavia, más, llegado el caso, Ucrania y otros del Este. Sin embargo, los procesos de ampliaciones futuras están paralizados a la espera de que se resuelva la crisis originada por la aprobación de
[10] Entre otras cuestiones, p.e., los ciudadanos de los nuevos países del Este no disponen todavía del pleno derecho a la libre movilidad dentro de
[11] Reforzamiento de la familia para intentar garantizar el cuidado (prioritariamente por parte de las mujeres) de una población cada vez más envejecida de la que el Estado se va desentendiendo.
[12] Brown se encuentra muy presionado mediáticamente por el grupo Murdoch, puntal del mundo “neocon” estadounidense, abiertamente opuesto a la pertenencia de Gran Bretaña a
[13] Polonia amenazó hasta el último momento con el No al nuevo Tratado de Reforma, y sacó a colación las tensiones históricas con Alemania. Los gemelos Kacinsky sermonearon sobre la invasión nazi durante
[14] En todas las áreas en las que las decisiones se toman por mayoría (hay 50 nuevas con el nuevo Tratado), ésta se alcanzará consiguiendo al menos el 55% de los Estados miembros y el 65% de la población.
[15] Durante dos años y medio, prorrogables a cinco.
[16] Los tres principales Estados europeos: Alemania, Gran Bretaña y Francia, cada día juegan un papel menor en el mundo actuando por separado, o hasta coordinados (a pesar de que los dos últimos son potencias nucleares y miembros permanentes del Consejo de Seguridad), e incluso la propia UE es un “enano” político a escala global, aparte de un “gusano” militar, como se dice irónicamente.
[17] Es decir, además de luchar con EEUU, vía OTAN, para tener acceso a dichos recursos, como lo estamos viendo hoy en día en Afganistán, para controlar Asia Central, o mediante la presión conjunta sobre Irán (en donde la nueva UE (Sarkozy-Kouchner) está convergiendo peligrosamente con EEUU en sus posturas más duras),
[18] Primero con el Tratado de Libre Comercio (TLC), en 1994, y ahora con el Acuerdo para Seguridad y Protección de América del Norte (ASPAN).
[19] Todavía no ha conseguido introducir el término “cristiana”, pero lo conseguido es un paso atrás muy considerable en el carácter laico hasta ahora de las instituciones comunitarias.
[20]Ver http://www.quiendebeaquien.org/spip.php?rubrique67
Llamativo resulta que a nadie parezca interesar en estas horas la opinión de quienes en 2005 se inclinaron por disentir del tratado constitucional de
Tiene su sentido que hagamos, sin embargo, un poco de memoria. Hace algo así como cuatro años las fuerzas vivas que alimentan
Sabido es que la jugada salió mal. Luego de algún espectáculo tan irrelevante como poco edificante —así, un referendo español en el que se alentó con descaro que la ciudadanía respaldase un texto que ignoraba por completo— llegaron los referendos francés y holandés. Curioso resultó que los dos países que acogieron debates serios y abiertos fuesen los únicos en los cuales la ciudadanía se inclinó por rechazar lo que, hablando en propiedad, convenía llamar tratado constitucional de
No era difícil imaginar que esas fuerzas vivas que acabamos de invocar buscarían una salida como la que ha cobrado cuerpo los últimos días. En sustancia se trata de recoger lo realmente importante, lo novedoso, del viejo tratado para configurar uno más breve y, en términos de presentación, más modesto, renunciando en paralelo a las parafernalias, para que de esta suerte no se mosqueen en demasía en Francia y en Holanda, y para que salgan airosos, de paso, quienes en su momento aplazaron sus referendos. Conviene subrayar cuantas veces sea preciso, sin embargo, lo que se barrunta en el núcleo de la fórmula finalmente abrazada: ésta recupera en su integridad un código de conducta que ha estado de siempre en la construcción de
En último término lo que se nos está diciendo —es una forma de hablar, porque nadie se atreve a afirmar tal cosa— es que fue un craso error permitir que, al menos en algunos países, el tratado constitucional fuese sometido a consulta popular. Nada peor para
No nos engañemos: el problema mayor hoy no es el vinculado con la letra del tratado original o del minitratado que a la postre se ha abierto camino. El problema principal es la realidad material de
Carlos Taibo,
Tratado modificativo de la UE: Inaceptable por su método y por su contenido
Publicado por Ricardinho en 22:30Pierre Khalfa
Agosto de 2007
Varios centenares de páginas incluyendo 297 modificaciones de los Tratados existentes, doce protocolos y algunas decenas de proyectos de declaraciones que tienen el mismo valor jurídico que los Tratados. Así es como se presenta el "Tratado modificativo" de
No se trata de hacer aquí un comentario exhaustivo, ya que por razones expresas no se han abordado una serie de temas; tan solo se van a tratar algunos aspectos y hacer una valoración global.
Un método contra todo debate democrático
La declaración común de los Gobiernos de
Un mes más tarde,
Se habría podido creer que a raíz del episodio del Tratado Constitucional europeo (TCE), los Gobiernos iban, al menos, a no reproducir este tipo de comportamientos. Ha ocurrido lo contrario y estamos asistiendo a la manifestación de una voluntad de exclusión de los ciudadanos europeos de todo debate sobre el futuro de
Este método es inaceptable y va en contra de las exigencias de muchos movimientos ciudadanos en Europa como, por ejemplo, los Attac de Europa que preconizan que se ponga en marcha una "nueva asamblea y democrática, elegida directamente por los ciudadanos de todos los Estados miembros, para elaborar un nuevo proyecto de Tratado, con la participación efectiva de los Parlamentos nacionales" y que "cualquier nuevo Tratado deberá presentarse a referéndum en todos los Estados miembros".
Un contenido que supone la prolongación de las orientaciones anteriores
El "Tratado modificativo" modifica los dos Tratados que existen, el Tratado de
El preámbulo del TUE ha sido cambiado con la adición de un considerando que indica que
La competencia
La prensa se hizo mucho eco del "éxito" alcanzado por Nicolás Sarkozy que consiguió que no apareciera la expresión "competencia libre y no falseada" como un objetivo de
El principio de la competencia sigue estando presente en muchos artículos de los Tratados. Citemos, por ejemplo, el artículo 105 que se ha mantenido en el TFUE, que confirma "el principio de una economía de mercado abierta donde la competencia es libre". Además este principio sigue siendo el núcleo de la mayoría de los actos legislativos europeos que siguen estando en vigor, en particular, los de liberalización de los servicios públicos.
Por último, para evitar cualquier falsa interpretación, el protocolo Nº 6 recuerda claramente el principio aplicable sobre este tema: "el mercado interior, tal como se define en el artículo [I-3] del Tratado de
Como se ve, la fuerza del derecho de la competencia sigue siendo la misma. Sigue siendo el derecho organizador de
Una modificación del artículo 93 en el TFUE, que se refiere a la armonización fiscal, además de a otras legislaciones relativas a los impuestos sobre volumen de negocios, indica que esta armonización debe llevarse a cabo con el fin "de evitar las distorsiones de la competencia". Sin embargo este procedimiento de armonización queda sometido a la unanimidad de los Estados. Más allá incluso del hecho de que habría sido necesario precisar en qué sentido debía hacerse - ya que algunos Estados no tienen impuesto de sociedades- esta armonización no parece que vaya a ver el día por el momento.
Política comercial. Movimiento de capitales
La política comercial de
El marco general de esta política lo definen conjuntamente el Parlamento y el Consejo europeos y las negociaciones las realiza
Este objetivo se ratifica de manera más amplia en el artículo 188 B del TFUE que indica que
Sin embargo, en la retórica habitual de
Se requiere sin embargo la unanimidad de los Estados para la celebración de acuerdos comerciales en "el ámbito de los servicios culturales y audiovisuales cuando estos acuerdos pueden incidir en la diversidad cultural y lingüística de
El Tratado modificativo no atenta, obviamente, a la libertad circulación de los capitales, no sólo entre los Estados miembros, sino también entre éstos y terceros países (arte 56 TFUE) y sigue siendo requerida la unanimidad de los Estados para cualquier medida destinada a limitar la liberalización de los movimientos de capitales (artículo 57-3 TFUE). Se contempla únicamente la posibilidad de restringir estos movimientos en la lucha antiterrorista
Papel del BCE. Política económica
La estabilidad de los precios forma ahora parte de los objetivos de
La independencia del BCE se sigue manteniendo, evidentemente (art.108 TFUE) y tendrá como único objetivo mantener la estabilidad de los precios, a diferencia de otros bancos centrales. Sin embargo viene inyectando fondos públicos para ayudar a las instituciones financieras afectadas por la crisis hipotecaria.
Como novedad, se introduce la posibilidad de que el Consejo pueda adoptar posiciones comunes de
Política de seguridad y defensa
Esta política se define y pone en práctica por acuerdos unánimes, adoptados en el Consejo. La defensa común de
El protocolo abunda en este punto, "recordando que la política de seguridad y defensa común de
El militarismo se fomenta oficialmente: "los Estados miembros se comprometen a mejorar progresivamente sus capacidades militares " (futuro arte. 27-3 TUE). Este debe ser, por otra parte, el único lugar donde el Tratado anima a los Estados a aumentar sus gastos públicos.
A su vez, y en nombre de la lucha contra el terrorismo se fomentan las intervenciones militares en el extranjero, al afirmar: "todas estas misiones pueden contribuir a la lucha contra el terrorismo, incluido el apoyo aportado a terceros países para combatir el terrorismo en su territorio" (futuro artículo 28 TUE). Se pide asimismo a los Estados Miembros (EM) que contribuyan, no más tarde del 2010, con unidades de despliegue rápido para las misiones de
Se establece asimismo (art. 188 del TFUE) una cláusula de solidaridad para la actuación conjunta de los EM en catástrofes naturales o ataques terroristas (incluyendo el uso de medios militares, en este caso)
Carta de Derechos Fundamentales
En efecto, los derechos sociales que se contienen en ella son de muy de escaso alcance. Por ejemplo, el derecho al trabajo y al empleo no existen y sólo figura el "derecho a trabajar". El derecho a la protección social es sustituido por un simple "derecho de acceso a las prestaciones de seguridad social y a los servicios sociales". Este texto está muy por detrás de
Otros temas plantean aún mayores problemas. El derecho al aborto y a la contracepción no son reconocidos por
En lo esencial, la aplicación de los derechos contenidos en esta Carta se remite a las "prácticas y legislaciones nacionales". Así pues , esta Carta no crea en lo fundamental derecho social europeo susceptible de reequilibrar el derecho de la competencia que seguirá siendo dominante a escala europea. Para completar la situación, siempre existen limitaciones a estos derechos que pueden aportarse si se juzgan "necesarias".
Además, para asegurarse de cualquier tipo de descontrol , el alcance es explícitamente limitado. El texto (de
Por otra parte,
Por último, ha sido suprimido el 4º párrafo del artículo 6 del TUE sobre los derechos fundamentales, que indicaba que "
A pesar de todas estas precauciones, este texto esta de más, incluso para algunos Gobiernos. Así el Reino Unido ha conseguido no estar obligado a su cumplimiento (Protocolo Nº 7) y Polonia e Irlanda prevén hacer lo mismo.
Servicios públicos
El artículo 16 del Tratado constitutivo de
Este artículo ha sido modificado. Se convierte ahora en el artículo 14 del TFUE. La nueva redacción menciona explícitamente la necesidad para
Estas modificaciones son positivas. Sin embargo, no afectan a la parte fundamental de la cuestión . En efecto, la aplicación de este artículo queda sometida explícitamente a los artículos 86 y 87 del Tratado. Estos artículos han sido conservados en el TFUE. El artículo 86 tiene un alcance considerable. Es mortífero para los servicios públicos. Éstos se someten a las normas de la competencia. Solo se pueden derogar si ello no supone un obstáculo para el desarrollo de los intercambios "en una medida contraria al interés de
La referencia a los artículos 86 y 87 vacía, de hecho, el nuevo artículo 14 de todo alcance operativo para desarrollar los servicios públicos.
El Protocolo Nº 9 hace referencia a los servicios de interés general (SIG). Es la primera vez que un texto de alcance jurídico equivalente a los Tratados menciona estos SIG. Se refiere a disposiciones interpretativas que se anexarán al TFUE. El artículo 1 puntualiza el artículo 14 sobre los SIEG. Preconiza "un elevado nivel de calidad, seguridad y accesibilidad, la igualdad de trato y la promoción del acceso universal y los derechos para los usuarios". Hay que temer que estas formulaciones generales, ya encontrados en otros textos europeos, no pesen demasiado cara a la apertura a la competencia, que sigue siendo la norma para los SIG.
Aparentemente más innovador, el artículo 2 se refiere a los SIG: "las disposiciones de los Tratados no afectan de ninguna manera a la competencia de los Estados miembros relativos al suministro, la puesta en servicio y la organización de servicios no económicos de interés general". Este artículo parece pues proteger los SIG de las normas de la competencia. El problema estriba, en realidad, en la definición de los "servicios no económicos" que no aparece en el texto.
Una sentencia del Tribunal de Justicia (C-180-184/98) indica que "constituye una actividad económica cualquier actividad consistente en ofrecer bienes y servicios en un determinado mercado ". Con este tipo de definición, casi todo puede considerarse como "una actividad económica" y en consecuencia puede ser sometido al derecho de la competencia y a las normas del mercado interior. Y de hecho, en un informe sobre los servicios de interés general, redactado con motivo del Consejo Europeo de Laeken al final del año 2001,
En este marco, el artículo 2 está destinado a no tener ningún alcance práctico.
Salud. Seguridad social
El artículo 18 modificado del TFUE hace referencia al libre derecho de circulación en
El artículo 42 modificado del TFUE se refiere a los derechos de los trabajadores migrantes en materia de seguridad social. El procedimiento de la unanimidad de los Estados es sustituido por un procedimiento más complejo que permite a un Estado bloquear momentáneamente un proyecto durante cuatro meses.
La declaración 14 indica que "en caso de que un proyecto de acto legislativo (...) afectase a los aspectos fundamentales del sistema de seguridad social de un Estado miembro (...) los intereses de dicho Estado miembro se tendrán en cuenta debidamente ". La necesidad de tal declaración dice mucho sobre lo que puede preverse.
El artículo 176 E del TFUE, que modifica el artículo 152 del Tratado constitutivo de
Transportes
El segundo párrafo del artículo 71 del TFUE ha sido modificado. Su redacción actual preveía la necesidad de la unanimidad de los Estados para adoptar, en el marco de la política común de transportes, medidas cuya aplicación podría afectar al nivel de vida, al empleo o a la explotación de los equipamientos de transporte. La nueva redacción indica simplemente que, en la aplicación de la política común de transportes, "se tienen en cuenta" estos aspectos. Se ha saltado con ello un cerrojo protector del servicio público de los transportes.
Energía
Se crea un título específico en el TFUE (artículo
Competencias recíprocas entre
Se ha precisado la distribución de las competencias entre
Aparecen tres tipos de ámbitos: los son competencia exclusiva de
En efecto, en el caso de temas de competencia compartida, el Tratado modificativo indica que "los Estados miembros ejercen su competencia en la medida en que
Los Estados mantienen un derecho de veto sobre la acción exterior de
Conviene resaltar que se excluye expresamente cualquier posible armonización de las legislaciones y reglamentos de los respectivos EM.
Las modificaciones institucionales
1. Derecho de iniciativa ciudadana
“ Los ciudadanos de
Por encima del hecho de que los ciudadanos no esperaban que este texto se incluyese en el Tratado para su aplicación , este derecho de petición permanece muy estrictamente enmarcado . Debe referirse a la aplicación de los Tratados. Así pues está fuera de lugar hacer cualquier petición destinada a su modificación. Además, es
2. Actos legislativos europeos. Papel de
Estos actos son las directivas, reglamentos o decisiones. La definición de estos términos viene dada por el artículo 249 del TFUE. Se ha modificado la definición de la "decisión". En su definición actual, una decisión, que es obligatoriamente aplicable, hacía referencia a uno o más destinatarios precisos. La nueva definición le da un alcance más general. Hay que preguntarse cuál es el sentido exacto de esta modificación.
El papel de
Un procedimiento legislativo especial consiste en la aprobación de un reglamento, de una Directiva o de una decisión por el Parlamento Europeo con la participación del Consejo o por éste con la participación del Parlamento europeo . A primera vista se observa una cierta oscuridad en este concepto de "procedimiento legislativo especial", que aparece con bastante frecuencia en el Tratado modificativo. En este caso, no se menciona el papel de
3. Papel de los Parlamentos nacionales y del Parlamento Europeo
Los Parlamentos nacionales aparecen en sucesivas ocasiones (nuevo artículo
El artículo 7 del protocolo Nº 2 indica el procedimiento que les permite incidir sobre el proceso legislativo europeo. Cada Parlamento nacional dispone de 2 votos. Aparecen dos casos hipotéticos. En el caso de un procedimiento legislativo ordinario, si se da una mayoría de los votos asignados a los Parlamentos nacionales que emite un dictamen negativo, el proyecto debe reexaminarse. En los otros casos basta un tercio de los votos (un cuarto en el caso de las cuestiones de seguridad y justicia). El dictamen negativo debe ser justificado por el incumplimiento del principio de subsidiariedad.
Este artículo refuerza ciertamente el papel de los Parlamentos nacionales. Sin embargo su alcance es muy limitado, puesto que los Parlamentos nacionales no se manifiestan sobre el fondo del proyecto, sino en relación a su conformidad jurídica : respeto o no del principio de subsidiariedad.
El papel del Parlamento Europeo se ve fortalecido por un aumento significativo de los ámbitos que dependen de la codecisión con el Consejo.
Finalmente un Parlamento nacional podrá bloquear una decisión del Consejo que transforme el método de adopción por este último de actos legislativos en el caso en que el Consejo decida votar por mayoría cualificada, en vez de por la unanimidad requerida por los Tratados, y en el caso de un cambio de un procedimiento legislativo especial a un procedimiento legislativo ordinario (nuevo artículo 33-3 TUE).
4. Derecho de recurso individual en el Tribunal de Justicia
Este recurso es limitado. En efecto, el 4º párrafo del artículo 230 TFUE ha sido modificado. La redacción actual preveía que un recurso de un individuo era posible incluso si las decisiones que le concernieran directa e individualmente “se hubieran tomado bajo la apariencia de un reglamento o de una decisión dirigida a otra persona". Esta última posibilidad ha desaparecido.
5. Las otras modificaciones
Combatir este Tratado, exigir un referéndum
El Tratado modificativo transfiere lo fundamental del TCE a los Tratados actuales. Como ha dicho crudamente Valéry Giscard de Estaing "(de esta manera ) los Gobiernos europeos se han puesto de acuerdo sobre cambios cosméticos a
La disposición, que permite al Reino Unido estar dispensado de aplicar
Más allá de todo lo dicho , permanecen las mismas razones de fondo para este Tratado que las que justificaron el rechazo del TCE. Caracterizado de principio a fin por el neoliberalismo, tanto en los principios que promueve como en las políticas que predica, este Tratado viene a ser una prolongación de los de Mastricht y Ámsterdam.
A estas razones de fondo hay que añadir el método empleado en su elaboración , que confirma la voluntad de los Gobiernos y de
Más allá de este asunto , es necesario exigir la celebración de un referéndum. El TCE fue rechazado por un referéndum. El "Tratado modificativo" que retoma el contenido fundamental de éste Tratado Constitucional , debe someterse directamente a la votación de los ciudadanos por referéndum.
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(Traducción realizada por Ricardo Gómez Muñoz)
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